Pólipos endometriales o uterinos: Todo lo que necesitas saber

Los pólipos endometriales, también conocidos como pólipos en el endometrio o pólipos uterinos, son tumoraciones benignas que se forman de la capa interna del útero, conocida como endometrio.

Suelen tener distintos tamaños y localizaciones y solo un 5% se vuelven malignos. Los pólipos pueden ser completamente asintomáticos o generar sangrados fuera del periodo menstrual, después de las relaciones sexuales y en la menopausia. También son una causa importante de infertilidad femenina.

Si presentas alguno de estos síntomas y no quedas embarazada, te recomendamos buscar atención especializada, ya que los pólipos uterinos pueden estar interfiriendo en el proceso de concepción.

Síntomas de los pólipos endometriales

Los síntomas que ayudan a reconocer que una mujer tiene pólipos endometriales incluyen:

• Menstruaciones con sangrado abundante y de larga duración
• Sangrado vaginal durante el periodo de la menopausia
• Sangrado después de las relaciones sexuales (coito)
• Salida del pólipo a través del cuello del útero (prolapso)
• Infertilidad

Como puedes ver, el sangramiento fuera de la menstruación (intermenstrual) es el principal indicio de los pólipos endometriales.

Si es tu caso, acude a consulta con un especialista lo antes posible. Aunque esta afección suele ser benigna (solo un 5% de los pólipos se vuelve maligno), es importante tener un seguimiento médico apropiado.

También es importante aclarar que cerca del 50% de las mujeres no presenta ningún síntoma que indique la presencia de pólipos uterinos. En estos casos la afección pasa desapercibida o se manifiesta con problemas para lograr el embarazo.

Causas de los pólipos en el útero

Hasta el momento, se desconoce la causa exacta de los pólipos endometriales. Existen varios estudios científicos que investigan sobre este tema pero todavía no se obtienen resultados concluyentes sobre el origen de la afección.

No obstante, se ha observado que hay factores que predisponen al desarrollo de pólipos en el útero. Entre los principales se encuentran:

• Edad de la mujer: entre los 40 y 65 años de edad es más probable tener pólipos endometriales.
• Inflamaciones crónicas del cuello del útero: los cuadros de cervicitis frecuentes y de larga duración (más de 3 meses) también son un factor predisponente.
• Aumento de estrógenos en la sangre: los estrógenos son hormonas que participan en el ciclo menstrual, en el desarrollo sexual de la mujer y otras funciones. Se plantea que estimulan el crecimiento de las células del endometrio y los pólipos.
• Uso de tamoxifeno: es un medicamento que se emplea para tratar el cáncer de mama en la mujer. Los estudios lo reconocen como un factor de riesgo para el desarrollo de pólipos.
• Ausencia de ovulación: esta alteración, también conocida como anovulación puede hacer que una mujer tenga mayores posibilidades de padecer esta condición.
• Terapia de reemplazo hormonal: cuando la mujer llega a la etapa de la menopausia, sus ovarios producen pocos estrógenos. Esto genera varios síntomas y para tratarlos se usan medicamentos que pueden favorecer los pólipos.
• Obesidad: un aumento de peso por encima de 30 de índice de masa corporal, es un factor de riesgo para que la mujer desarrolle tumoraciones benignas en el endometrio.
• Hipertensión arterial: parece tener una influencia directa en el desarrollo de los pólipos endometriales. Aunque se desconoce exactamente cómo lo hace.
• Enfermedades genéticas: algunas condiciones de origen genético y poco frecuentes como los síndromes de Cowden y de Lynch, pueden aumentar la posibilidad de sufrir pólipos.

Todos los factores mencionados anteriormente tienen en común cambios hormonales. Se continúa investigando para entender cómo es que estas variaciones pueden originar pólipos en el útero femenino.

¿Cómo se diagnostican los pólipos endometriales?

Para diagnosticar los pólipos endometriales, el especialista te hace una serie de preguntas relacionadas con tu estado de salud, realiza un examen físico e indica estudios.

Preguntas relacionadas con tu estado de salud

En la consulta el doctor realiza muchas preguntas que lo ayudan a determinar si los síntomas se deben a pólipos endometriales u otra afección.

• ¿Qué edad tienes?
• ¿Cómo son tus menstruaciones?
• ¿Tienes sangramiento fuera del periodo menstrual?
• ¿Sangras luego de las relaciones sexuales?
• ¿Estás haciendo algún tratamiento con hormonas?
• ¿Tienes presión sanguínea alta?
• ¿Has presentado infecciones del cuello uterino (cervicitis) con frecuencia?
• ¿Padeces alguna enfermedad genética?
• ¿Has quedado embarazada alguna vez?

Examen físico

Luego de hacer estas preguntas, el doctor te examina para descartar cualquier otra afección que pueda ocasionar síntomas similares.

Puede que te indique una revisión pélvica para:

• Observar las paredes de la vagina
• Descartar la presencia de pequeñas heridas que puedan estar sangrando
• Mirar el cuello del útero
• Determinar la presencia de infecciones vaginales e inflamación del cuello uterino

Estudios

Después de las preguntas y el examen físico, el doctor también indica pruebas para ver los ovarios y el útero. Entre los estudios más comunes para el diagnóstico de los pólipos están:

• Ultrasonido transvaginal: es un equipo de ultrasonido fino que se introduce por la vagina, lo que permite ver con mayor claridad el interior del útero de la mujer.
• Histeroscopia: se introduce un dispositivo delgado por la vagina, llamado histeroscopio, el cual permite localizar los pólipos dentro del útero y hasta tomar una muestra para biopsia. Este estudio puede hacerse con o sin anestesia.
• Biopsia: mediante la histeroscopia se puede obtener una muestra de tejido endometrial que se lleva al laboratorio, se tiñe con colorantes especiales y se observa al microscopio. Esto puede ayudar a confirmar si realmente son pólipos y descartar los procesos malignos como el cáncer.

¿Cómo afectan a la fertilidad los pólipos en el endometrio?

Los pólipos endometriales afectan la fertilidad porque dificultan la fecundación del óvulo, influyen negativamente en la implantación del embrión y son causa de abortos recurrentes.

Dificultan la fecundación

Los estudios realizados demuestran que las mujeres con pólipos endometriales tienen niveles altos de glicodelina. Dicha sustancia evita la unión del óvulo con el espermatozoide, por lo que las posibilidades de lograr el embarazo se reducen mucho.

Influyen negativamente en la implantación

Muchas veces los pólipos crecen cercanos a la apertura de las trompas de Falopio en el útero. Los pólipos grandes obstaculizan la salida del óvulo fecundado hacia el útero y por tanto, impiden la correcta implantación del embrión.

Causan abortos recurrentes

La presencia de varios pólipos en la cavidad uterina entorpece la implantación y crecimiento apropiado del embrión. Es por eso que, las mujeres con esta afección tienen mayores probabilidades de tener abortos frecuentes.

Tratamiento de los pólipos uterinos

Los pólipos endometriales se pueden tratar de dos maneras fundamentales, con medicamentos y con cirugía.

Medicamentos

Para el control de los síntomas, generalmente se usan medicamentos hormonales. Entre los fundamentales están:

• Agonistas de la hormona liberadora de gonadotropina (potencian la función de la hormona)
• Progestinas (ayudan a regular el ciclo menstrual)

Cirugía

La extirpación de los pólipos se conoce como polipectomía uterina. Es una cirugía sencilla que se puede hacer durante la histeroscopia. Al histeroscopio se le coloca una herramienta de corte que permite extraer los pólipos de forma muy rápida.

Este tratamiento se realiza en mujeres con:

• Sangramiento abundante
• Síntomas que no mejoran con medicamentos
• Problemas de fertilidad y deseo de tener hijos

Los pólipos endometriales requieren atención especializada

Los pólipos pueden ser muy molestos para la mujer. Causan sangrados inesperados que pueden interferir con la vida cotidiana y otras molestias.

Los pólipos endometriales también son una causa importante de infertilidad femenina. Si este es tu caso, en FertilT podemos ayudarte. Agenda una cita con nosotros para encontrar una solución a tu problema.